Asóciate
Participa

¿Quieres participar?

Estas son algunas maneras para colaborar con el movimiento laicista:

  1. Difundiendo nuestras campañas.
  2. Asociándote a Europa Laica.
  3. Compartiendo contenido relevante.
  4. Formando parte de la red de observadores.
  5. Colaborando económicamente.

La aventura de conducir un coche siendo mujer

Diez latigazos estuvo a punto de llevarse el año pasado una mujer por conducir en Arabia Saudí. Yemen es algo más permisivo que su vecino, aunque también allí para muchas mujeres el hecho de ponerse al volante constituye un desafío a la tradición. De ahí la historia de Intisar, una mujer que no existe pero en la que se funden muchos casos reales y que encuentra sobre las cuatro ruedas la sensación de libertad que tanto ansía. "No lo puedo evitar. Si un tío se pica conmigo, he de seguir hasta el final. Aunque me mate", dice el personaje.

El guionista de ‘El coche de Intisar’, Pedro Riera, pasó un año en Yemen -el país árabe con mayor índice de pobreza, sólo superado por el área de Gaza- con motivo de un traslado laboral de su mujer. La segregación de sexos de la sociedad llevaba a tener que citarse a escondidas con algunas de las pocas amigas que pudo hacer durante su estancia. De las conversaciones con más de 40 mujeres nace este cómic, con dibujos de Nacho Casanova y publicado por Glénat (ahora EDT).

El libro se completa con un apéndice sobre la sociedad y la cultura yemení, en el que se profundiza en aspectos como el consumo de 'qat', una droga vegetal que consumen más de la mitad de los hombres y cerca de un 30% de las mujeres. También hace hincapié en las razones del uso del 'hiyab' (velo que cubre la cabeza y deja a la vista el rostro, que las mujeres le contaban que llevaban por convicción) y del 'niqab', que sólo muestra los ojos.

Como le ocurre a Intisar en un momento del cómic, cuando su padre le ha prohibido conducir y se cruza tras aparcar su coche con un hermanastro que no le reconoce tras el niqab, algunas mujeres explican que esta prenda es "un arma de doble filo" porque a veces les concede más libertad. Así lo cuenta Riera en los apuntes finales, cuando incide en que una amiga le confesó que mientras "los hombres lo usan para esconder a sus mujeres de las miradas de los demás, estas a su vez lo pueden utilizar para esconderse de sus propios hombres".

La Intisar de este cómic, soltera y sin hijos, es el compendio de anécdotas e historias de mujeres reales. Una de ellas quiso firmar el prólogo del libro, amparada en el anonimato de 'una mujer yemení'. Unas líneas en las que reivindica la lucha de las mujeres del país: "Muchos de vosotros creéis que la situación de la mujer en Yemen y en los demás países árabes es debida al Islam. En realidad, el enemigo contra el que luchamos en Yemen no es el Islam, sino una ‘religión’ de costumbres y tradiciones que han ido evolucionando y ganando terreno en las últimas décadas. Sé que es posible que yo no gane esta batalla en vida, pero para mí lo importante es saber que he dejado mi huella, probablemente no en el mundo, pero sí en la mente de otros a los que he empujado a ver las cosas a través de mis ojos y mi forma de pensar".

El Nobel de la Paz reconocía el año pasado la lucha de las mujeres por la igualdad y su participación en la 'Primavera árabe', como hizo la Tawakul Karman, la 'Che Guevara yemení' que, como Intisar, sueña con un Yemen "democrático, libre y próspero" en el que las mujeres ejercitemos sus derechos "sin necesidad de pedir permiso a un hombre o contar con una aprobación".

Archivos de imagen relacionados

  • conducir mujer Arabia
Total
0
Shares
Artículos relacionados
Total
0
Share