Los últimos datos de Hacienda muestran, sin embargo que la proporción de liquidaciones en la que los ciudadanos optaron de forma exclusiva por la Iglesia Católica (un 22,47 por ciento), a través de la casilla correspondiente del IRPF, tan sólo se incrementó en cinco décimas porcentuales respecto a 2001.
De hecho, si se observa la evolución de la asignación tributaria desde 1999, los datos muestran que la proporción de personas que rellenan únicamente la casilla de la Iglesia Católica, ha pasado del 29,36 por ciento al 22,47 (siete puntos porcentuales menos).
Sin embargo, el importe de la cuota íntegra asignada a la Iglesia Católica, salvo en el ejercicio de 2001, no ha dejado de aumentar: 88.564 millones (1999); 97.737 (2000); 95.690 (2001) y 105.991 (2002). En total, en estos cuatro años, el importe destinado a la Iglesia se ha incrementado un 16,5 por ciento.
OTROS FINES SOCIALES
Mientras tanto, la proporción de liquidaciones en las que se consignó exclusivamente la asignación tributaria para otros fines sociales fue del 32,6 por ciento durante el último año, participación superior en un punto porcentual a la del ejercicio anterior.
Al contrario de lo que ocurre con la Iglesia católica, las liquidaciones destinadas a otros fines sociales han aumentado de manera paulatina entre 1999 y 2002: 29,36 por ciento, 27,45, 22,01 y 22,47, respectivamente.
Por su parte, las liquidaciones en las que se señalaron simultáneamente las dos casillas representaron un 11,9 por ciento (seis décimas porcentuales más que en 2001). Por el contrario, las liquidaciones en las que los contribuyentes no se manifestaron a favor de ninguna de las dos opciones registraron un descenso de algo más de dos puntos porcentuales (del 35,1 por ciento en 2001 al 33 en en 2002)
