La californiana supone la cifra más abultada, con una compensación global cercana a los 77 millones. Las víctimas de Washington estaban en una posición legal más débil que las de California porque sus demandas se referían a supuestos abusos cometidos más allá del límite de tiempo para estas demandas. El abogado Peter Gillon, que las representa, consideró que la compensación es «equitativa».
«No se repetirá»
El predicador de la Casa Pontificia, Raniero Cantalamessa, pidió ayer al papa Benedicto XVI que se celebre un día de penitencia por las víctimas de la pederastia, en particular las de los sacerdotes. Cantalamessa hizo esta petición en su primer predicación en tiempo de adviento, pronunciada ante el Sumo Pontífice en la capilla Redemptoris Mater.
«La Iglesia ha llorado y suspirado recientemente por los abominables hechos cometidos en su seno por algunos de sus ministros y pastores. Ha pagado y los abusos no se repetirán», dijo.