La Corte Suprema tiene programado escuchar el miércoles los argumentos de un ateo de California, Michael Newdow, que objetó que el juramento sea recitado diariamente en el aula de su hija de 9 años. El hombre demandó a la escuela y ganó, sentando las bases para una apelación sin precedentes que ha obstruido repetidamente la lectura de la oración en las aulas, los campos deportivos y las ceremonias escolares.
Las autoridades del distrito escolar de Elk Grove, cercano a Sacramento y al que pertenece la escuela de la niña, han dicho que no importa si la frase ‘bajo Dios’ en la jura a la bandera es popular o no, pues viola la ley.
Popularidad
‘No es un concurso de popularidad. Si hay algo que está equivocado, debe corregirse. No importa cuántas personas lo apoyen’, dijo el superintendente escolar de Elk Grove, Dave Gordon.
La polémica frase no formaba parte del juramento original escrito en 1892. El Congreso la insertó en 1954, después de un cabildeo de líderes religiosos durante la Guerra Fría. Desde entonces, se ha vuelto una frase conocida entre toda una generación de estudiantes.
La Corte Suprema no deberá buscar resolver si debe modificarse la Jura a la Bandera, sino decidir si el uso de la oración en escuelas públicas viola la Constitución, que prohíbe la religión en el gobierno.