En el acto religioso el uso de las mascarillas era opcional y, como muestran las imágenes, no se respetó el distanciamiento social.
En el estacionamiento de Cidra Church en Palm Springs, en donde cientos de personas se reunieron el sábado, para ser parte de un evento religioso acompañado por un concierto. Fueron multados, por presuntamente no haber solicitado un permiso a la ciudad.
Chris Nelson cofundador de “Reopen South Florida”, dice:
“Lo que están viendo ahora es un asalto sin precedentes a la libertad religiosa en los Estados Unidos de América”.
Nelson fue uno de los asistentes del evento afuera de la Iglesia Cidra en Palm Springs el sábado pasado que reunió a cientos de personas.
La Dra. Leslie Diaz, experta en enfermedades infecciosas, dice:
“Yo siempre digo que dios dice cuídate que te cuidaré. Estamos aquí para propagar el amor de Jesucristo y no puedes hacer eso a seis pies de distancia”
En el acto religioso el uso de las mascarillas era opcional y, como muestran las imágenes, no se respetó el distanciamiento social.
“Estoy tan contento de ser parte de esto en donde las personas toman una postura y dicen no nos pueden cerrar”.
Explicó que la Iglesia enfrenta una multa por parte de la ciudad, ya que presuntamente necesitaban un permiso para el evento y éste no había sido otorgado.
La Dra. Leslie Diaz, dice:
“Cuando hay congregaciones de ese tipo eso es como un súper Spreader event. Este virus no es para negociar porque tiene el mando”
La Dra. Díaz asegura que en este tipo de eventos el contagio del COVID-19 es muy común, pero más preocupante su efecto multiplicador.
“Cada persona que tenga el concepto de transmitir tiene que multiplicarlo 10 20, 100 personas dependen de cuántas personas uno tiene contacto”
Bajo el liderazgo del gobernador De Santis, los servicios religiosos presenciales en la Florida están permitidos.
Giovanni Barazza, asegura: “Ultimadamente como lo vemos Dios nos protege la espalda”
“La gente tiene que seguir pensando que si ponen de su parte podremos llegar a esa luz mucho más rápido de lo que estamos haciendo en este momento”, dice la doctora.
La ciudad de Palm Springs aún no se ha pronunciado sobre este hecho.
