Nada fácil será el viaje que el Papa inicia al Reino Unido. Colectivos ateos, laicistas y el lobby gay se han unido para reventar su visita e intentarán bloquearle para que no pueda visitar una universidad.
Además, la BBC emitirá documental sobre la pederastia en la Iglesia la víspera de su llegada al país.
Los principales vaticanistas coinciden en que la visita de Benedicto XVI a Reino Unido puede ser el viaje más complicado de su Pontificado, incluso más que el que realizó a Turquía tras sus palabras sacadas de contexto en Ratisbona o el que realizó a Israel y Jordania.
En las islas tendrá que enfrentarse a una extraña alianza formada por todos aquellos que quieren reventar su viaje. Colectivos ateos y laicistas muy belicistas, un muy movilizado lobby gay y grupos progresistas que exigen igualdad en la Iglesia Católica realizarán una manifestación en Londres contra el Papa el mismo día que éste visite la capital.
Además, un sector del anglicanismo también se la tiene jurada tras el éxodo de un grupo importante a Roma. También la BBC colabora en esta campaña con la emisión de un documental especial sobre los casos de pederastia en la Iglesia realizado por un ex fraile domínico y declarado homosexual. A esta campaña también se han sumado medios extranjeros, especialmente españoles como El País y Público, que han tergiversado noticias afirmando que habrá que pagar para ir a las misas del Papa
El Papa llegará el próximo 16 de septiembre a Reino Unido. Un día después, cuando Benedicto esté en Londres, habrá una manifestación cuyo lema es "No, el Papa no es bienvenido". Colectivos de todo pelaje se han unido contra el Papa y le acusan de varios delitos. Colectivos homosexuales, grupos ateos encabezados por el polémico Richard Dawkins, incluso un grupo de ex musulmanes marcharán contra el representante católico. Además, a éstos se unen grupos progresistas que exigen la ordenación de mujeres.
Tras la marcha intervendrán un sacerdote homosexual anti Vaticano, el propio Dawkins o la representante de Mujeres contra el Fundamentalismo, todo un maremágnum que difícilmente podría estar unido en otras circunstancias. Esta coalición, dice Efe, tiene previsto hacer ruidosas protestas e intentarán bloquear la entrada del Pontífice al campus de St Mary´s University, donde se reunirá con miles de alumnos. Es tal la virulencia que anuncian que otros grupos opositores les han pedido "moderación".
Para fomentar aún más este ambiente enrarecido y anticatólico, decenas de autobuses urbanos que circulan por el centro de Londres llevan publicidad desde finales de agosto con el lema: "Benedicto, ordene mujeres ya". Más de 18.000 euros se han gastado en esta campaña orquestada por otro de los grupos que pretenden presionar a Roma, "Ordenación de Mujeres Católicas", de carácter progresista.
Sin embargo, uno de los principales actores de esta campaña es la televisión pública británica, la BBC. Pese a que prometió a realizar una cobertura adecuada del viaje, lo cierto es que ha aprovechado para poner su granito de arena. Justo un día antes de la llegada del Papa emitirá un documental sobre los casos de abusos sexuales en la Iglesia
Según recoge EFE, el documental, titulado "Benedicto: Tribulaciones de un Papa", es obra de Mark Dowd, un homosexual y ex fraile dominicano que ha acusado al Papa de estar "equivocado" en su supuesta crítica de la homosexualidad. The Sunday Times afirma además que Dowd está también detrás de un programa que bajo el título de "Las Divisiones del Papa" emitirá la emisora Radio 4 de la BBC el próximo jueves y en el que se trata del estado de la Iglesia católica.
El cardenal británico Keith O'Brien acusó a la BBC de "sesgo institucional" anticristiano en vísperas de la visita. Según el prelado, la emisora pública británica se resiente de un enfoque radicalmente laicista. Considera también que la televisión pública dedica demasiado tiempo a ateos como el biólogo Richard Dawkins, a la vez que margina las opiniones cristianas de cuarenta millones de ciudadanos de este país.
Por último, el Papa se enfrenta al problema de los anglicanos, tradicionalmente muy hostiles con los católicos, en Reino Unido. Uno de los motivos del viaje es la beatificación del cardenal Newnan, un converso del anglicanismo, y muy admirado por el teólogo e intelectual Ratzinger.
Esto no ha gustado a ciertos sectores del anglicanismo, que ven igualmente como su iglesia se está desmoronando. De hecho, otra parte de la polémica viene por el éxodo de una parte de los anglicanos al catolicismo, hartos de la deriva de su actual confesión.
Desde un primer momento el viaje del Papa ha estado cargado de polémica. Primero fueron las amenazas e intenciones de los laicistas y grupos ateos de detener y procesar al Papa en cuanto pisara territorio británico. Y por otro un documento interno oficial del departamento del Ministerio de Exteriores encargados de los actos que proponían que Benedicto XVI inaugurase una clínica abortista y que se lanzas una marca papal de preservativos. Al instante se vieron obligados a pedir perdón al Vaticano.
