El presidente boliviano, Evo Morales, viajó hoy al Vaticano para participar en el Encuentro Mundial de Movimientos Populares organizado por la Santa Sede, en el cual será el único mandatario extranjero. Morales partió en las primeras horas de la mañana del aeropuerto militar de El Trompillo en la oriental ciudad de Santa Cruz con la intención de asistir a la reunión, en la cual se debatirá la situación de los sectores excluidos.
Al evento asistirán unos 150 líderes de organizaciones populares de todo el mundo, en el marco de la cual el jefe de Estado de Bolivia podría entrevistarse con el Papa Francisco, según trascendió acá.
Morales podría, incluso, insistir en invitar a Bolivia a Francisco, según adelantó desde finales de la semana anterior el presidente de la Cámara de Diputados, Marcelo Elío.
El Encuentro Mundial de Movimientos Populares se realizará en la Casina Pío IV, donde radica la Academia Pontificia, y Morales, en su calidad de líder indígena, dictará la conferencia Plurinacionalidad, Estado y Movimientos Populares.
El mandatario, de origen aimara, viajó al Vaticano en compañía del canciller David Choquehuanca, en momentos de ataques mutuos entre el gobierno y la cúpula de la Iglesia Católica boliviana.
Poco después del triunfo en las elecciones generales bolivianas, el jefe de Estado acusó a las altas esferas de la Iglesia Católica de ser sus enemigos, y criticó la posición de dos medios subordinados a la misma, Red Uno y Radio Fides.
Mientras, la jerarquía eclesiástica insistió en las críticas al mandatario.
Morales y Francisco se entrevistaron por primera vez en septiembre del año anterior, ocasión en la cual el mandatario boliviano invitó al Sumo Pontífice a visitar Bolivia, lo cual podría ocurrir en 2015 o 2016.
Hasta el momento, el único Papa que visitó el país del altiplano fue Juan Pablo II, en 1988
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