Descargo de responsabilidad
Esta publicación expresa la posición de su autor o del medio del que la recolectamos, sin que suponga que el Observatorio del Laicismo o Europa Laica compartan lo expresado en la misma. Europa Laica expresa sus posiciones a través de sus:
El Observatorio recoge toda la documentación que detecta relacionada con el laicismo, independientemente de la posición o puntos de vista que refleje. Es parte de nuestra labor observar todos los debates y lo que se defiende por las diferentes partes que intervengan en los mismos.
Recientemente se ha estrenado en la plataforma Max el documental ‘El minuto heroíco’, que en cuatro capítulos recoge las vivencias de numerarias del Opus Dei que han logrado abandonar esa organización católica. El trabajo está enfocado en las víctimas que han sufrido prácticas sectarias, misóginas y clasistas por parte de la Obra.
Las trece protagonistas explican a cámara cómo fueron captadas por esa organización, qué mecanismos de control y desconexión social sufrieron, las injusticias y martirios a los que las sometieron cuando estaban dentro, lo difícil que les resultó salirse y cómo han rehecho su vida en libertad. El rigorismo doctrinal va acompañado de un depurado sistema de manipulación, aislamiento, delación y explotación que los testimonios reflejan muy bien.
Tal y como explica hoy en una entrevista en 7K la directora, Mònica Terribas, el documental busca «despertar compresión y empatía», «romper silencios» y aportar al debate. Si los miembros de la Obra logran verlo, también interpelará a quienes conozcan o puedan estar viviendo situaciones como las que describe. En ese sentido, el debate puede ayudar a que se pueda hacer justicia, en unos casos, y a que se rompa la cadena, en otros.
En sí, ‘El minuto heroíco’ no es un análisis de las estructuras de poder, las finanzas o la influencia política del Opus Dei, pero sin duda ayuda a comprender mejor cómo ha funcionado la organización fundada por José María Escrivá de Balaguer. Además de los testimonios de las numerarias, la participación de periodistas, psicólogas y expertos en sectas católicas enriquecen el documental, que también cuenta con una parte dramatizada sobre la cotidianeidad sectaria.
Cualquiera que lo vea no podrá evitar preguntarse cómo es posible que no haya causas abiertas en varios países contra el Opus Dei por fraude a la Seguridad Social, trata de seres humanos, vulneración de la privacidad o violación de derechos de la infancia. Hay un proceso abierto en Argentina, donde 43 víctimas denunciaron que trabajaron de forma irregular y perdieron el derecho a pensiones. Hay algún otro caso, pero son minucias, vista la gravedad de lo narrado.
Todo ello sin entrar al tema de agresiones sexuales o pederastia, extendido en la Iglesia católica. Hace poco se conocía que en el «caso Gaztelueta» el Vaticano se ha limitado a expulsar del Opus al pederasta, dejando de lado el encubrimiento del que gozó y la gravedad de los hechos, revictimizando a la víctima.
Una agenda misógina de raíz religiosa
Ayer era 8 de Marzo y en Euskal Herria miles de personas salieron a las calles para denunciar las opresiones del sistema heteropatriarcal y para defender la igualdad y la libertad. El contexto de esta lucha es ahora el choque con la ola reaccionaria que lideran la ultraderecha y las oligarquías. Un rearme en el que la religión quizás no sea el elemento central, pero juega un papel legitimador indiscutible. La agenda retrógrada no esconde su inspiración religiosa.
Entre las crónicas sobre el miércoles de ceniza y el ramadán, entre los partes sobre la salud del Papa Francisco y los análisis del genocidio sionista, convendría retomar en serio el debate sobre las religiones y las instituciones religiosas, sobre su poder y su influencia sociopolítica. Por ejemplo, la misoginia institucionalizada en esas doctrinas y estructuras es inaceptable desde un punto de vista democrático.
Sin menospreciar el impulso antropológico hacia lo religioso y lo transcendental, sin perder de vista las experiencias prohibicionistas erróneas, sin ceder al buenismo ni al cinismo, combinando un análisis profundo y una estrategia inteligente, habría que ver cómo afecta el factor religioso a las luchas por la emancipación y cómo hacerle frente de forma eficaz.