José Antonio Fernández fue despedido en 1997 por defender el derecho de los sacerdotes a pasar por el altar
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos, con sede en Estrasburgo, ha fijado para el 22 de noviembre el juicio oral del excura murciano José Antonio Fernández Martínez, despedido tras ejercer como profesor de Religión en un instituto de Caravaca de la Cruz por sus actividades en favor del celibato opcional y el defender el derecho de los curas a casarse.
Fernández Martínez, que tiene cinco hijos, acudió al Tribunal Europeo de Derechos Humanos, representado por el letrado José Luis Mazón, al ver desestimado el recurso de amparo planteado ante el Tribunal Constitucional contra la sentencia de la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Murcia, que desestimó su demanda contra el Obispado de Cartagena por el despido. El alto tribunal desestimó la demanda de amparo del sacerdote porque no se vulneraron sus derechos. El demandante se ordenó sacerdote en 1961, en 1984 pidió la dispensa y contrajo matrimonio, tras lo que, en 1991, comenzó a ejercer como profesor de Religión en un instituto de Caravaca de la Cruz y después en otro de Mula, pero fue cesado en 1997, después de que se hiciera público que participaba en el Movimiento Pro Celibato Opcional.
Según Mazón, «son rarísimos los casos en que el Tribunal de Estrasburgo convoca una vista oral, ya que la inmensa mayoría se resuelven por alegaciones escritas sin presencia física».
