A los actos de “El Rocío de la Fe” no faltó la representación municipal con el alcalde, ediles del PP, UCOR y del PSOE.
Carretas, caballos, faralaes, flautas y tamboriles llenaron ayer el Patio de los Naranjos y los alrededores de la Catedral, que se empapó de Rocío hasta tal punto que parecía la mismísima aldea de Almonte. Los que habían venido para la ocasión y los que se encontraron con este acontecimiento disfrutaron de una estampa única que puede que no vuelva a repetirse. Las mujeres se vistieron de flamenca y hombres de corto en pleno menos de noviembre y justo el día en el que más bajan las temperaturas del otoño. Pero el frío no fue ningún impedimento para los rocieros, que llenaron de color y devoción las calles de Córdoba.
"Es porque es el Año de la Fe", explicaban algunos, "el simpecado de Almonte nunca había salido de Huelva", presumían otros y así todos los comentarios que se escuchaban tenían que ver con el Rocío de la Fe. Los comercios, cafeterías y bares de la zona reconocieron el trasiego de gente que fue mayor una vez que concluyó la misa y el cortejo partió hacia las Tendillas, donde tuvo lugar el acto religioso. Así, a medida que avanzó la tarde y se adentró la noche se fue ganando en afluencia y en imagen.
Ningún rociero se quiso perder tan magno acontecimiento. Así llegaron autobuses desde casi todos los municipios de la provincia y también de otras localidades. Es el caso de Ramón, Juan José y Miguel, que llegaron desde Sevilla y recordaban que hace poco tiempo habían vivido algo parecido con el bicentenario de la Hermandad del Rocío de Triana.
"Es algo muy original y no nos lo queríamos perder", aseguraron. Los madrileños Carlos y Raquel sin embargo, no tenían ni idea de que el fin de semana que habían elegido para pasar en Córdoba coincidía con este acto religioso pero "estamos encantados", confesaron.
Otro de los elementos que más llamó la atención fueron los altares que diversas hermandades de penitencia instalaron en las calles del centro. Algunos comentaban que no se había visto tanto nivel en cuanto a decoración ni en las celebraciones del Corpus, donde esta tradición este tipo de ornamentación. Coros infantiles y otros de aficionados también vivieron una jornada mágica al formar parte desde dentro de un acontecimiento tan importante. No faltó la representación municipal con el alcalde, José Antonio Nieto, a la cabeza, así como varios miembros de la corporación como los ediles Carmen Sousa, Luis Martín, Amelia Caracuel, Rafael Navas y Laura Ruiz (PP), Aurora Aguilar (UCOR) o Francisco Alcalde (PSOE). Este último confesó ayer minutos antes de empezar la misa que estaba encantando con los dos últimos acontecimientos cofrades mientras conversaba con los alcaldes de Puente Genil y Lucena.
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