El debate sobre la controvertida Bill 62 está lejos de disolverse: el líder del Partido Quebequense (PQ) acaba de decir que va a proponer su propia ley de aconfesionalidad antes de Navidad y que incluirá una mayor restricción de las vestimentas religiosas que cubren el rostro.
Puede que los críticos la llamen Estatuto de Valores 2.0, en honor a la proposición de ley que en 2013 propuso el PQ con el objetivo de alcanzar un “razonable acomodo”. De hecho, el PQ dice que se trata de una oportunidad para hacer una ley que profundice en los acomodos religiosos.
“Si lo hacemos, lo haremos con seriedad”, dijo Jean-François Lisée.
Él dijo que la Bill 62 fue un fracaso y que Québec necesitaba empezar de nuevo a elaborar una ley de aconfesionalidad, una que incluya la completa prohibición del niqab y el burka en espacios públicos.
“Tenemos una mesa de expertos informándonos sobre lo acontecido en Francia, Austria, Suiza, Noruega… todos esos países que aplicaron restricciones totales o parciales al velo”, dijo Lisée.
Los liberales dijeron que este movimiento parece una extraña estrategia política del líder del PQ después de su derrota electoral en 2014.
“Incluso el Sr. Lisée admite que si la gente no le votó fue precisamente por su Estatuto de Valores”, dijo el líder liberal Jean-Marc Fournier.
Si salen elegidos, tanto el PQ como la Coalición Avenir Québec (CAQ) dicen que derogarán la Bill 62. La CAQ además asegura que prohibirán que las figuras de la autoridad pública como la policía, los jueces e incluso los maestros y profesores puedan portar simbología religiosa.
Sin embargo, en lo que todos los partidos parecen estar de acuerdo es en acomodos razonables en lo que atañe a las prendas que ocultan el rostro. Fournier señala que todos los partidos de la oposición están trabajando en proposiciones de ley similares a la Bill 62.
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Traducción de Felipe Reyes Guindo para Observatorio del Laicismo
