Demetrio Fernández dice que quienes piden el culto compartido no les importan musulmanes ni católicos
Permitir a los musulmanes orar en la Mezquita de Córdoba "es un eufemismo que significa: católicos váyanse de aquí". Así lo piensa el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, quien no cree que sea posible "el uso compartido" de la Catedral y antigua mezquita tal y como reclaman algunos colectivos musulmanes.
Ante esto, Fernández quiso dejar claro que "la respuesta a la pregunta sobre el uso compartido de la Catedral es que no, porque en este lugar la Iglesia Católica lleva 16 siglos, mientras que los musulmanes han estado cuatro siglos y medio".
En consecuencia, la Iglesia Católica tiene "una buena relación con los musulmanes" y quiere colaborar con quienes profesan la religión islámica en la búsqueda constante de "la paz, la justicia y la convivencia entre los pueblos, pero eso es una cosa y otra, muy distinta, es querer compartir el mismo templo para el culto, lo cual no es posible, ni por parte musulmana, ni por parte católica, ya que los musulmanes no admitirían un templo compartido, y los católicos tampoco lo admitimos. Luego, habría que preguntarse quién pide el uso compartido: pues aquellos a quienes no les importan los musulmanes ni los católicos".
En cuanto a sí se ha incrementado ya, como se había previsto, la seguridad de la Catedral durante las visitas, a raíz de que un grupo de turistas austriacos de religión musulmana intentaron, el pasado abril y en plena Semana Santa, rezar en el templo cristiano, llegando a agredir a los vigilantes de seguridad que querían impedirlo y a la Policía Nacional, que luego detuvo a varios de estos turistas, Fernández destacó que el Cabildo Catedralicio de Córdoba "ha tomado nota del asunto, lo ha estudiado y ha respondido adecuadamente, porque tiene medios para hacerlo".