El lehendakari, Iñigo Urkullu y todos sus consejeros, excepto la titular de Seguridad, han asistido a la misa que ha oficiado en el santuario de Arantzazu el obispo de Gipuzkoa, José Ignacio Munilla.
Todos los consejeros del Gobierno de Lakua, con el lehendakari Iñigo Urkullu a la cabeza, han asistido a la misa que ha oficiado el obispo de Gipuzkoa, José Ignacio Munilla, con motivo de la festividad de Nuestra Señora de Arantzazu. La única consejera que no ha acudido ha sido la titular de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia.
Al oficio religioso también ha asistido la presidenta del Parlamento de Gasteiz, Bakartxo Tejeria.
El portavoz del Ejecutivo, Josu Erkoreka, publicaba en su cuenta de Twitter el siguiente tuit:
El diputado general de Gipuzkoa, Martín Garitano, junto a la mayor parte de su gabinete también ha acudido a Arantzazu, al igual que el alcalde y la corporación municipal de Oñati, si bien la máxima autoridad de Gipuzkoa no ha asistido a la misa oficiada por Munilla y ha presenciado una muestra de escultura que se expone en el centro Gandiaga.
Concentración de Etxerat
Garitano también ha saludado a la representación de Etxerat que se ha concentrado en el exterior de la basílica y ha denunciado la situación que padecen los prisioneros enfermos, los que han cumplido las tres cuartas partes de la condena y la dispersión que se les aplica.
«Queremos llamar al Gobierno español a que se mueva», ha explicado Garitano, quien ha anunciado si el Ejecutivo de Mariano Rajoy «persiste en esa actitud absolutamente inmovilista e injusta», emplazará «al conjunto de la sociedad vasca y a los agentes sociales y políticos del país a una gran movilización que obligue» al Gobierno español «a poner en términos de resolución el conflicto vasco».
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