Acompañó con otras autoridades y funcionarios al arzobispo y al Nuncio para coronar a la Virgen de Juquila.
El gobernador del estado de Oaxaca, Gabino Cué, ha participado en actividades de indiscutible índole religiosa y que al actuar en esas acciones, lo hizo en su carácter de Gobernador Constitucional, violentó y pone en peligro el principio de la laicidad que, por mandato constitucional caracteriza a la República Mexicana.
El arzobispo de la Arquidiócesis de Antequera, José Luis Chávez Botello, el Nuncio Apostólico, Christophe Pierre y el gobernador Gabino Cué Monteagudo arribaron al Cerro del Azufre para dar inicio con la ceremonia solemne y coronar a la Virgen de Juquila.
En la ceremonia también participarán diversos servidores públicos y funcionarios del Gobierno del Estado como el secretario de Salud, Germán Tenorio Vasconcelos, el defensor de los Derechos Humanos, Arturo Peimbert Calvo, los senadores del PRD y PRI, Benjamín Robles Montoya y Eviel Pérez Magaña.
Los cohetes anuncian el arribo de la imagen de la Virgen de Juquila quien será colocada en su nicho de honor para iniciar con el protocolo y la ceremonia para su coronación.
La laicidad al garantizar la separación y reciproca autonomía entre la esfera religiosa y la esfera política y al someter a las iglesias a las leyes de Estado, constituye una condición necesaria para que la pluralidad y la diversidad puedan expresarse y recrearse libremente.
Solo en una Estado laico se garantizan la igualdad en derechos, sin importarlas creencias o convicciones de las personas, y las libertades de conciencia y de religión.
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