Asóciate
Participa

¿Quieres participar?

Estas son algunas maneras para colaborar con el movimiento laicista:

  1. Difundiendo nuestras campañas.
  2. Asociándote a Europa Laica.
  3. Compartiendo contenido relevante.
  4. Formando parte de la red de observadores.
  5. Colaborando económicamente.

El cura libre y vigilado

El religioso está condenado a 15 años de prisión por dos casos de abuso sexual y corrupción de menores agravados

La Corte Suprema de Justicia consideró “extemporáneo” un pedido para ordenar la detención inmediata del sacerdote Julio César Grassi. Por ello, al menos de momento, el religioso, condenado a 15 años de prisión por dos casos de abuso sexual y corrupción de menores agravados, continuará beneficiándose de la “libertad vigilada” de que goza desde junio de este año. La decisión del tribunal, tomada por seis de los siete jueces que lo componen, desestimó, así, el recurso de queja que el abogado Luis Paglietti había presentado en representación de uno de los querellantes, porque, para los jueces, la gestión fue hecha a destiempo. Sin embargo, el abogado Juan Pablo Gallego, querellante, explicó a este diario que el recurso rechazado “en realidad no afecta demasiado” el devenir del caso “porque es un recurso que se superponía con otra vía”. “La competencia concreta sobre la detención de Grassi está en el Tribunal de Morón, que es el de origen de la causa”, explicó Gallego a este diario. En ese juzgado, agregó el letrado, en diciembre sí podría llegar a decidirse la detención del sacerdote condenado.

El recurso rechazado por la Corte, explicó Gallego, que en el juicio representó al Comité Argentino de Seguimiento y Aplicación de la Convención Internacional de los Derechos del Niño, era el resultado de una serie de apelaciones generadas luego de la sentencia. “En rigor, la sentencia originaria de Morón (el Tribunal Oral en lo Criminal, TOC, Nº 1), que condena y no detiene, generó que tanto la querella como la fiscalía pidiéramos la detención en otras instancias. Pero luego, al obtener la detención, porque la dicta el tribunal de Morón, la causa quedó radicada ahí. Ni yo como querellante ni la fiscalía pidieron otra vía”, explicó el abogado Gallego en diálogo con este diario. De allí que el tribunal competente sobre el caso sea el TOC Nº 1.

La resolución explícitamente señala que “se desestima la queja” porque “el recurso de hecho ha sido deducido extemporáneamente”, y lleva las firmas de los jueces Ricardo Lorenzetti, Elena Highton de Nolasco, Enrique Petracchi, Juan Carlos Maqueda, Raúl Zaffaroni y Carmen Argibay. Aunque fue notificada ayer, lleva fecha del 27 de noviembre.

La condena del sacerdote por los delitos que cometió en su fundación, Felices Los Niños, fue confirmada por la Cámara de Casación Penal de la provincia de Buenos Aires en septiembre de 2010. Pero las apelaciones posteriores, elevadas a tribunales superiores, aún están pendientes.

El sacerdote Grassi goza de un régimen de “libertad vigilada” desde el 1º de junio de este año, por decisión de la Cámara de Apelaciones de Morón. Hasta ese momento, estaba sometido a arresto domiciliario impuesto por el TOC 1, luego de que fuera denunciado que, violando las condiciones de su libertad, se había acercado a la Fundación. El abogado Fernando “Burlando había confirmado que se había reunido con Grassi en la Fundación”, recordó a este diario el abogado Gallego. Desde marzo, había pasado 82 días preso en su casa de San Justo, pero por un “error técnico formal” la Cámara dejó sin efecto esa decisión y optó por el beneficio de la libertad vigilada, al tiempo que ordenó una nueva audiencia.

Al quedar nuevamente en libertad, Grassi se instaló en La Blanquita, la quinta de Hurlingham donde dispone de oficina y hasta de una capilla para dar misa. Ese predio, de la calle Gorriti al 4400, además está ubicado justo enfrente de la Fundación Felices Los Niños, escenario de los hechos de abuso sexual y corrupción de menores por los que el sacerdote fue condenado en primera y en segunda instancia.

En diálogo con este diario, el abogado Gallego explicó que la audiencia que decida sobre el pedido de detención inmediata de Grassi debería realizarse durante diciembre. El fallo tiene todavía por delante instancias de apelación hasta quedar firme.

El sacerdote Julio César Grassi fue condenado el 10 de junio de 2009 por el TOC 1 a una pena de 15 años de prisión, al hallarlo culpable de dos casos de abuso sexual contra un menor al que se conoce como Gabriel. El chico asistía a la Fundación Felices Los Niños, que el cura dirigía, donde se daba albergue a chicos judicializados. Sin embargo, el condenado Grassi no fue a prisión, sino que recibió un régimen de libertad con restricciones, que no fue resuelto ni por la Cámara de Apelaciones ni por el Tribunal de Casación bonaerense que, en cambio, en septiembre de 2010 sí ratificó la condena a 15 años.

Total
0
Shares
Artículos relacionados
Total
0
Share