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El crucifijo se queda en el salón de plenos

El texto judicial indica que el mantenimiento del símbolo católico no atenta contra el no creyente. Una sentencia prioriza «el respeto a las tradiciones»

El crucifijo, el máximo símbolo católico, continuará presidiendo el salón de plenos del Ayuntamiento, el espacio central de la vida política municipal. Una sentencia dada a conocer ayer por la propia alcaldesa de Cáceres, Elena Nevado, da la razón al consistorio y desestima la demanda que Izquierda Unida, el PSOE y la asociación Cáceres Laica (que ha quedado deslegitimada por la juez en el proceso judicial) hicieron el pasado mes de junio.
 
La jueza Belén Maqueda Pérez de Acevedo considera en el texto, del 15 de enero y que fue notificado ayer, que la presencia de este elemento debe entenderse «no como una imposición de unas particulares creencias religiosas, sino como manifestación del respeto a dichas tradiciones», tal y como puede leerse en la sentencia del juzgado número 2 de lo contencioso Administrativo de Cáceres.
 
Utilizando distinta jurisprudencia, y destacando la que dictó el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León en diciembre de 2009 en un caso similar, la jueza llega a la conclusión de que aunque el Estado ha de mantener la libertad ideológica, de conciencia y religión, ese principio «no es incompatible con la presencia de símbolos religiosos en lugares públicos que como el presente no son sino expresión de la historia y cultura en nuestro país». En distintos puntos de la sentencia hace alusión al carácter cultural del crucifijo, presente en infinidad de lugares públicos y cuyo mantenimiento no puede entenderse como «posturas de intolerancia hacia el no creyente».
 
Elena Nevado incidió ayer en que los grupos demandantes tendrán que pagar las costas del proceso judicial, que puede alcanzar los 3.000 euros. Nevado ha calificado el crucifijo como «símbolo de la historia y de la cultura» y ha recomendado al PSOE que «esté a lo que debe estar y no a montar circos».
 
Esta sentencia se puede recurrir, aunque Vicente Valle, portavoz socialista en el Ayuntamiento, señaló ayer que «con los problemas que hay actualmente nosotros no lo vamos a recurrir». Considera que hay temas «más importantes», aunque reconocía que tenía que consultar la decisión con el resto del grupo y leer pormenorizadamente la sentencia. El concejal de Izquierda Unida, Manuel Cruz, indicó acerca de la posibilidad de recurrir la sentencia que «ya se verá». Dijo acatarla, pero no compartir su contenido, teniendo en cuenta que «el Estado ha de ser neutral y aconfesional».
 
Histórico
Hace más de ocho años el crucifijo que preside esta estancia municipal incomoda a los concejales de IU. En 2004 en una sesión plenaria esta coalición pidió la retirada de este símbolo religioso. En 2008, con la socialista Carmen Heras como alcaldesa, se repitió esta solicitud, esta vez por parte de la asociación Cáceres Laica, y el PSOE la rechazó. Este hecho también lo resaltó en la mañana de ayer Elena Nevado. Cuatro años después, el pasado marzo, IU volvió a la carga en otro pleno, pero la mayoría del PP echó por tierra su solicitud. El siguiente paso fue la demanda judicial que ha generado esta sentencia.
 
Elena Nevado indicó ayer que se el crucifijo del Ayuntamiento se va a someter a un proceso de restauración. En el libro 'Patrimonio Artístico del Ayuntamiento de Cáceres' de Moisés Bazán de Huerta, Carmen Marchena García y Montaña Paredes Pérez da detalles de este elemento. Se hace referencia a que procede de la antigua capilla municipal situada en el antiguo consistorio, que se ubicaba en las llamadas Casas del Corregidor, en el Foro de los Balbos.
 
También se señala que pudo ser adquirido en los años 60 del siglo XX, de manos del alcalde Alfonso Díaz de Bustamante. Por sus características los autores creen que podría datarse en el siglo XVII, en el Barroco, aunque no se cita un posible autor.
 
En el libro se dice que el crucifijo, ubicado sobre un retrato del Rey Juan Carlos I, es de madera policromada y que mide 100 x 69 x 24 centímetros.
 
Puede leerse la sentencia en:

Elena Nevado, delante del retrato del Rey y el crucifijo. :: HOY

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