La oposición y el Ateneo Republicano pidieron la eliminación de las placas del templo de San Bartolomé
Los símbolos que recuerdan a los caídos por Dios y la Patria, que se encuentran en el interior de la iglesia de San Bartolomé en Petrer, así como otra placa que recuerda el incendio que hubo en el templo y que culpa a los revolucionarios, se "mantendrán como hasta ahora". Así lo detalló ayer a este medio el párroco del templo, Antonio Rocamora, quien explicó que el consejo parroquial, compuesto por 24 personas, se reunió en la noche del pasado lunes con la presencia de 19 representantes para deliberar sobre la petición de los grupos de la oposición, quienes reclamaron en un escrito la retirada de los tres símbolos que recordaban a la época franquista. "Por una amplia mayoría se ha decidido que las placas de los caídos continuarán tal y como están", aseguró Rocamora.
Hay que recordar que los grupos de la oposición en el Ayuntamiento de Petrer junto al Ateneo Republicano instaron, aprovechando que el templo estaba desde hace poco más de un mes en obras, al Consejo Parroquial de la iglesia de San Bartolomé a que retirara de las paredes del templo el mural que hace referencia a la pasada Guerra Civil y que recuerda a los caídos por Dios y la Patria, así como otra placa que recuerda el incendio que hubo en el templo y que culpa a los revolucionarios. En una carta, que hicieron llegar al párroco, instaban la retirada de los símbolos ya que "recuerdan a un periodo tumultuoso de la historia", según el escrito.
Los emblemas
Los símbolos que recuerdan a la época franquista se encuentran en el interior del templo y en total se cuenta con tres signos. El primero de ellos está colocado en una de las columnas del edificio, en la parte derecha concretamente y, puede leerse "Recuerdo de Petrel a sus caídos por Dios y por la Patria, 1936-1939". La segunda de las placas hace referencia a que "la iglesia fue reconstruida gracias a la aportación y esfuerzo de los industriales de la villa". Y, por último, el tercer símbolo se refiere a que la iglesia ha dejado una pequeña parte de una cúpula sin pintar, para mostrar la negrura que sobre las paredes dejó el incendio del año 1936. La historia de la retirada de los símbolos que recuerdan a los caídos no es nueva y ya se reclamó su retirada hace más de 20 años. En aquella ocasión el consejo parroquial también rechazó dicha retirada.
Las dos placas que se encuentran en el interior de la iglesia.
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