Camino pide que se marquen ambas casillas
"La Conferencia Episcopal no tiene nada en contra de que se apoye la labor humanitaria de las ONG", recalcó ayer el secretario general de la Conferencia Episcopal, Juan Antonio Martínez Camino. Es más, calificó de "contrasentido" enfrentar la casilla de la Iglesia a la destinada a fines sociales. El portavoz episcopal llegó a reclamar que en el futuro ambas aparezcan totalmente diferenciadas, incluso en páginas distintas del modelo de IRPF.
La petición tiene sentido. Los ingresos por una u otra casilla son independientes entre sí. Y la Iglesia sale beneficiada en ambos casos, puesto que alrededor del 40% de los proyectos financiados a cargo de los fondos de fines sociales pertenecen a ONG e instituciones vinculadas a la Iglesia católica.
Aunque es cierto que el destino en cada caso es bien distinto y que instituciones como Cáritas Española o la Fundación Juan Ciudad llevan muchos años realizando una importante labor en la lucha contra la pobreza.
Dentro de la Plataforma de ONG de Acción Social se integran 25 organizaciones no gubernamentales, federaciones y redes estatales que, a su vez, agrupan a miles de entidades de carácter local, provincial, autonómico y estatal.
De vuelta a los fondos episcopales, Martínez Camino indicó que los resultados obtenidos "permitirán mantener el sostenimiento de las actividades básicas de la Iglesia en niveles de eficiencia y austeridad semejantes a los que han venido siendo habituales hasta ahora". Sin embargo, confirmó que, pese a los beneficios, las otras formas de colaboración al sostenimiento de la Iglesia (colectas, suscripciones, campañas) "continuarán siendo absolutamente indispensables".
De cara a la próxima campaña, el portavoz episcopal agradeció la solidaridad de "muchos, incluso no católicos", que han marcado la casilla, y deseó que "sean todavía muchos los católicos y los contribuyentes que aprecian la labor de la Iglesia los que sepan que marcar la casilla no cuesta nada y que, sin embargo, rinde mucho".
