Es lógico que los padres y madres del colegio salesiano de Úbeda protesten por la eliminación en este centro de una unidad de infantil de 3 años, enmarcada dentro de la redistribución de plazas escolares cuyo funcionamiento está previsto para el próximo curso, pero que consideren esta eliminación de una unidad como una agresión, en mi opinión es pasarse de la raya.
Todos los años, al iniciarse el proceso de escolarización, la Consejería de Educación tiene en cuenta los datos estadísticos de cada localidad a la hora de establecer el número de unidades para el siguiente curso académico. Así, si aumenta la natalidad aumentan las unidades, y si disminuyen los nacimientos, se minora el número de las aulas previstas.
De este modo, por poner un ejemplo, el pasado curso escolar en Torreperogil se suprimió una unidad de 3 años en un centro público (no hay privados, ni concertados ni desconcertados). Que yo sepa, ni el PP salió defendiendo la permanencia de esa unidad, ni tildó a la Junta de dejarse arrastrar por el lastre comunista, ni apoyó, a la hora de elegir la educación de sus hijos; a las 14 familias de ese centro que tuvieron que matricular a sus hijos en el otro colegio torreño. El PSOE, al contrario que este año en Úbeda, tampoco dijo ni “mu” al respecto, ni exigió buscar alternativas, como ha hecho hace pocos días la Secretaria local en Úbeda de este partido, ¡el mismo que gobierna Andalucía! y que ha adoptado esta medida, a mi parecer de manera muy diferente a como hace el Partido Popular en las comunidades autónomas donde ejerce el poder, comunidades en las que se cobra a las familias hasta por que sus hijos puedan comerse en el colegio la comida que se llevan de su casa en un tupper. Todavía estoy echando de menos el comunicado del PSOE protestando no por la supresión de una unidad, sino por el cierre de un colegio entero. ¿Será porque no es lo mismo cerrar un colegio público con doscientas plazas, pagado por todos los españoles, que suprimir 25 plazas en un colegio privado concertado, pagado igualmente por todos los españoles? ¿Con el colegio Matemático ni una palabra y con los Salesianos mostramos indignados nuestro rechazo? ¿Por qué será?
No tuvo el pasado año ese colegio público de Torreperogil al que antes me refería el apoyo de una inexistente patronal de Escuelas Públicas de Andalucía que promoviera un minuto de silencio por la supresión de unidades. De la misma manera, el Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo, como no se enteró, supongo, de esa supresión ni de la eliminación de decenas de unidades escolares en centros públicos causadas por el descenso de natalidad en Andalucía, una caída que es producto de esta crisis que el Partido Popular iba a arreglar y que parece ser que lo está haciendo muy bien multiplicando el número de parados, el de empresas cerradas y subiendo los impuestos, tampoco medió para exponer su "preocupación" por el descenso de unidades en los colegios públicos andaluces. ¿Se trata de un Defensor del Pueblo Andaluz público o privado concertado?
Este curso, lo que sucedió el año pasado en uno de los colegios de Torreperogil, volverá a ocurrir: se ha eliminado una unidad de 3 años, pero esta vez afectará al otro colegio público de esta villa vecina a Úbeda. ¿Han oído ustedes algo al respecto? ¿Ya no nos encontramos ante una agresión? ¿Ya no hay que buscar alternativas? ¿Ha desaparecido el lastre comunista? ¿Ya no necesitamos la mediación del defensor Chamizo?
A mí me resultaría muy difícil comprender que, habiendo medios en los centros públicos de Úbeda para atender la demanda escolar, se mantuvieran conciertos innecesarios con la enseñanza privada. Si esto llega a suceder, podría constituir un derroche del dinero público muy difícil de explicar en estos tiempos austeros o, lo que sería aún peor, un mal uso de los caudales públicos.
Archivos de imagen relacionados
