El Presidente de la República, en calidad de Presidente de la Unión Europea, acaba de delegar la organización a los Ministerios de Asuntos Exteriores y al Ministerio del Interior, de un coloquio, el 17 de diciembre de 2008, a París, titulado “Religiones y poder público en la Unión Europea”.
Invita a los 27 países que constituyen la Unión Europea a participar, enviando a una delegación, cuyo modelo recomendado es el siguiente: un responsable encargado, en el Estado de las cuestiones religiosas y de los cultos:
– Un sacerdote o un Pasteur,
– Un rabino,
– Un imam.
Así, la Presidencia francesa concreta los compromisos verbales asumidos en la visita del Papa Benoît XVI, integrando las religiones en la gestión pública de los Estados.
Es una violación manifiesta de la ley de 1905 sobre la separación de las Iglesias y del Estado,
Es también una violación de la Constitución francesa que menciona expresamente la laicidad de la República.
Está claro que el objetivo consiste en conferir a las tres religiones antes citadas un estatuto particular lo que equivale a establecer una discriminación entre los ciudadanos.
El Centro de Acción Laico belgapide a las asociaciones laicas de alertar las autoridades políticas de sus países, para que boicoteen esta reunión.
La Federación Nacional del Libre Pensamientose asocia plenamente a esta acción. Llama la atención de los ciudadanos sobre las consecuencias de esta política de integración religiosa.
Interviene ante la Presidencia de la República, repitiendo su demanda de entrevista para insistir sobre la posición de los ciudadanos conformes con la laicidad del Estado que, recordémoslo, son mayoritarios.
