La vicepresidenta se reunirá con la Conferencia Episcopal para abordar el impuesto en cuanto se renueve su cúpula en marzo
La Iglesia comenzará a pagar el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) de los edificios no destinados al culto, según ha dado por hecho en la tarde de este miércoles la vicepresidenta primera y ministra de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Carmen Calvo, en el Congreso, en una comparecencia, su primera en esta legislatura, destinada a relatar las líneas maestras de su área.
Entre ellas Calvo es la responsable de una dirección general sobre libertad religiosa, cuyo objetivo es garantizar “la neutralidad de los poderes del Estado” en relación con todas las confesiones. Por ello, después de haber anunciado su interés por abordarlo en varias ocasiones, la vicepresidenta ha situado como algo inminente la revisión de la situación fiscal de la Iglesia católica para acabar con la exención de IBI, al igual que sucede en Francia e Italia.
La vicepresidenta primera de Pedro Sánchez ha asegurado que es algo que ya ha tratado con el Vaticano y que ha encontrado la “mejor disposición”.
Pero, la posición de la jerarquía católica española es mucho menos comprensiva con este pago, del que han estado exentos hasta ahora, según recogen los acuerdos entre el Estado y la Santa Sede de 1979.
Con la Conferencia Episcopal pendiente de renovación el próximo mes de marzo, la número dos del Gobierno se propone abordar este asunto en cuanto haya una nueva cúpula del catolicismo en España.
Además, el Gobierno ya tiene prácticamente lista la relación de bienes inmatriculados de la Iglesia, es decir, registrados a su nombre, pese a carecer de los títulos de propiedad, para abordar también este tema con la nueva Conferencia Episcopal y recuperar algunos de ellos.
