La Iglesia católica expresó su rechazo a convertir a Bolivia en un Estado laico mediante las reformas constitucionales que debe aprobar la Asamblea Constituyente que se reunirá desde agosto.
Los obispos demandaron, en cambio, el apoyo del Estado "al sentido religioso y las creencias de sus ciudadanos", en un documento que circuló hoy y que resume el contenido de la homilía que pronunciaron el jueves en todas las misas que celebraron con motivo de la festividad de Corpus Christi.
Los obispos se pronunciaron en respuesta a la propuesta de algunos candidatos a constituyentes de eliminar un artículo constitucional que reconoce a la religión católica como la oficial del Estado y garantiza el ejercicio público de todo otro culto.
"El Estado no puede ser antirreligioso, pues iría contra una dimensión esencial de sus mandatarios. Más aún, debe apoyar a los pobladores en el derecho a su propia formación religiosa y a la de sus hijos", dijo en su homilía el arzobispo de La Paz, Edmundo Abastoflor.
