El sacerdote de la Diócesis de Irapuato, Luis Esteban, fue arrestado acusado de violación y corrupción de menores en agravio de una menor de edad.
La Fiscalía General del Estado (FGE) no difundió el caso, como lo hace con otros, sin embargo solicitó al Poder Judicial que el sacerdote fuera vinculado a proceso penal.
El cura católico enfrenta la causa penal 1P1619-1062 y será el 11 de agosto cuando el juez de control determine si el clérigo es vinculado a proceso penal. Mientras tanto está preso en el Centro de Reinserción Social de Irapuato (Cereso).
La menor de edad acudía al catecismo al templo de la Soledad y el cura le enviaba mensajes por celular. Posteriormente los padres descubrieron que su hija había sido víctima de abusos sexuales.
Trascendió que el presunto violador se ordenó como sacerdote en marzo de 2016, en una misa encabezada por el obispo, José de Jesús Martínez Zepeda.
Los artículos 180 y 181 del Código Penal establecen penas de ocho a 15 años prisión a quien imponga una copula y de 10 a 17 años de prisión a quien viole a un menor de 14 años.
La pena se incrementa en la mitad del máximo cuando el delito es cometido por un ministro de culto. El sacerdote podría purgar una pena de hasta 25 años y medio de cárcel.
La Diócesis de Irapuato, ahora encabezada por el obispo Enrique Díaz Díaz, había negado que uno de sus sacerdotes hubiera sido detenido, pero este miércoles emitió un comunicado donde acepta que Luis Esteban fue arrestado el 5 de agosto.
Lamentó “profundamente esta inesperada situación” y reveló que el lunes, el cura fue presentado ante un juez.
“Comprometidos con la verdad y la justicia, en colaboración con las autoridades civiles, confiamos en que se actuará conforme a la ley y con transparencia, garantizando la defensa legal a la que tienen derecho las partes implicadas”, explicó.
“Asumimos con dolor este hecho y de antemano pedimos perdón a quienes se pudieran sentir ofendidos por este caso y manifestamos nuestra disponibilidad de asumir con responsabilidad los hechos que nos correspondan”, añadió.
La Diócesis de Irapuato aseguró que nunca han encubierto, ni encubrirán actos que dañen a las personas.
