Asóciate
Participa

¿Quieres participar?

Estas son algunas maneras para colaborar con el movimiento laicista:

  1. Difundiendo nuestras campañas.
  2. Asociándote a Europa Laica.
  3. Compartiendo contenido relevante.
  4. Formando parte de la red de observadores.
  5. Colaborando económicamente.

El cardenal Sandoval acusa al alcalde de Guadalajara (México) de perpetra una terrible blasfemia por su estatua a la Virgen

Desde el Observatorio del Laicismo denunciamos que se instalara un estatua a la Virgen en el espacio público y además con fondos públicos, ahora los ultracatólicos y el cardenal Sandoval a la cabeza acusan al alcalde de blasfemo pues la imagen de sincretismo religioso de la estatua no le ha gustado a la jerarquía católica. Todo hubieran sido elogios si la imagen se ajustara a sus cánones. Para nosotros solo hay una doble vulneración del Estado laico, costear con fondos públicos una imagen religiosa y utilizar el espacio común para colocarla.


El pasado 14 de agosto este indigno gobernante develó una figura grotesca y blasfema, elaborada con dos placas metálicas de 9 metros de altura intersectadas, en la que se representa un remedo de la imagen de la Virgen de Guadalupe pero con serpientes rodeando su cabeza y coronada por la  cabeza de un macho cabrío, además de tener en el vientre calaveras como símbolo de muerte.

En la ciudad mexicana de Guadalajara, capital del Estado de Jalisco se ha perpetrado el mayor agravio que se haya visto en los  últimos tiempos contra la imagen de la Virgen de Guadalupe a manos del alcalde que gobierna dicha ciudad Enrique Alfaro.

El pasado 14 de agosto este indigno gobernante develó una figura grotesca y blasfema, elaborada con dos placas metálicas de 9 metros de altura intersectadas, en la que se representa un remedo de la imagen de la Virgen de Guadalupe pero con serpientes rodeando su cabeza y coronada por la  cabeza de un macho cabrío, además de tener en el vientre calaveras como símbolo de muerte.

Esta figura que lleva el nombre de sincretismo, fue presentada por el alcalde como una unión de dos culturas: la hispana y la indígena, esta última representada por los símbolos de la diosa Coatlicue que es, dentro del panteón de las deidades indígenas prehispánicas en México, la diosa de la tierra y de la muerte, representada por la luna que es vencida por el sol y aparece con dos ríos de sangre de “sus hijos”, los hombres, que cada día devora para sobrevivir.

Pero nada tiene que ver Coatlicue con la figura sagrada de la imagen estampada por mano divina en el ayate de San Juan Diego, es ésta, la Virgen Santa María de Guadalupe quien aparece parada sobre la luna, es decir, pisando a la Coatlicue y así lo interpretaron los indígenas, además aparece arropada por el sol, que es quien derrota a la diosa indígena y aparece encinta con el símbolo de la divinidad con lo que ella es la Madre del único y verdadero Dios por quien se vive.

No es casual que este agravio se haya dado en la que es la ciudad más católica del país y cuna de los santos mártires de la guerra cristera y epicentro de la resistencia de dicho conflicto religioso sucedido hace 90 años.

Esta ciudad es además, la sede de la Arquidiócesis con el seminario más grande del mundo, con lo que es la Arquidiócesis con más vocaciones y ordenaciones sacerdotales por año de toda la Iglesia Universal, por lo que está considerada el semillero de la Iglesia, todo ello mérito y fruto del gobierno del arzobispo emérito Cardenal Don Juan Sandoval Iñiguez.

Esta es la razón por la que desde hace décadas, esta ciudad ha sido blanco de ataques y operaciones de parte de la masonería internacional, pues Guadalajara y Jalisco, son la esencia misma de la identidad nacional mexicana por ser el lugar de origen de lo más representativo de México ante el mundo: el mariachi, la charrería, el tequila y las canciones mexicanas.

Enrique Alfaro el alcalde blasfemo, tiene aspiraciones de convertirse en el próximo gobernador del estado más católico de México en 2018, en el cual Guadalajara, la capital del estado y ciudad que mal gobierna, es uno de los 125 municipios que componen la geografía de Jalisco.

La molestia por el mal proceder del alcalde se ha incrementado al hacerse público que la figura esperpéntica se pagó a un escandaloso sobreprecio que supera por más de 10 veces el costo de material y “mano de obra del artista” además de pagarse con impuestos públicos de una población a la que no se le tomó su parecer si estaba de acuerdo en que se dilapidaran recursos tan urgentes en otras áreas, en lugar de usarse para insultar la fe y creencia más sagrada de México.

La situación de Guadalajara desde hace casi tres años que este hombre la mal gobierna, se ha tornado en  un infierno de inseguridad y violencia desbordada, delincuencia fuera de control como nunca se había vivido y un deterioro en la infraestructura de la ciudad cuyas calles parecen campo minado, destruidas y con obras malhechas por lo que el agravio no es solo religioso sino social también, de parte del alcalde Alfaro.

Esta situación se ha agravado y ensombrecido por el actuar de la autoridades religiosas de la arquidiócesis que, contrario a toda lógica y a su obligación de pastores que velen por el resguardo de la fe que les fue confiada, han salido a la defensa de esta aberrante y blasfema figura, encabezados por el mismo arzobispo de Guadalajara, cardenal José Francisco Robles Ortega, presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) que ha respaldado públicamente la intención y al artista cayendo incluso en el patético papel de portavoz del escultor Ismael Vargas ante los medios de comunicación, y ofendiendo a quienes se han indignado con esta ofensa llamándolos “gente sencilla” y “sin sensibilidad” artística para comprender y apreciar esta supuesta obra de arte.

En una posición totalmente contraria, valiente y como digno pastor y guía espiritual del pueblo mexicano, el aguerrido cardenal y arzobispo emérito de Guadalajara don Juan Sandoval Iñiguez, ha sido la voz que más se ha alzado denunciando esta ofensa a la sagrada imagen guadalupana.

El Cardenal Sandoval Iñiguez, que ha dedicado saludos y felicitaciones a Infovaticana alentando a sus directores a seguir adelante con la labor de defensa y difusión de la fe, es el artífice de los impresionantes logros que convirtieron a la arquidiócesis a su cargo en la más importante del mundo en los rubros antes mencionados, además de declararse enemigo abierto, frontal y acérrimo de la masonería mexicana, lo cual le ha costado dos intentos de asesinato a través de envenenamiento que lo tuvieron al borde de la muerte.

Fue precisamente este valiente cardenal quien, en su homilía de la celebración religiosa más importante de la ciudad de Guadalajara el 11 y 12 de octubre, que es cuando se realiza el traslado de la patrona de la ciudad, la imagen peregrina de nuestra señora de Zapopan, a su basílica después de seis meses de visitar las parroquias de la ciudad, lanzó durísimas críticas afirmando sin ambages que: “es blasfemia de quienes la pagaron y ES BLASFEMIA DE QUIENES LA DEFIENDEN”, este último rubro, encabezado por el Cardenal Robles Ortega.

Ante la cobarde y cómplice postura de las actuales autoridades arzobispales de Guadalajara, e inspirados en la valiente defensa hecha por el Cardenal Don Juan Sandoval Iñiguez, el pueblo laico católico ha tomado la defensa de su fe en sus propias manos y ha salido a manifestarse públicamente en repudio a sus autoridades que han atentado y violentado su fe al imponer un insulto como muestra de una malentendida libertad artística que patrocina el gobierno municipal.

Es por ello que este sábado 14 de octubre a las 4 de la tarde, hora del centro de México, una vez más se concentrará el pueblo católico de Guadalajara a las afueras de la estación del tren ligero El Refugio, sobre la avenida Federalismo para manifestar su inconformidad, exigir el retiro y destrucción de la imagen blasfema y hacer un acto de reparación por las ofensas hechas a Dios y a su Madre Santísima.

Desde México y a nombre del pueblo guadalupano del mundo entero deseamos agradecer a Infovaticana su interés y apoyo en la defensa de nuestra fe y de la patrona de América que es Madre también de España y de la Iglesia.

Este sábado resonarán por las calles del centro de la ciudad de Guadalajara los canticos cristeros y los gritos de combate en defensa de la fe que resonaron hasta el cielo cuando los cristeros enfrentaban la persecución y el martirio:

“Viva Cristo Rey y Santa María de Guadalupe”

Total
0
Shares
Artículos relacionados
Total
0
Share