Como cada primer domingo de febrero, miles de personas han subido hasta la Abadía del Sacromonte para participar en la romería del Patrón de Granada, San Cecilio. El ambiente festivo se iniciaba a primeras horas de la mañana con la llegada de los primeros romeros, cuyo número ha ido creciendo según avanzaba el día. La buena climatología ha animado a muchos a subir al Sacromonte, donde al mediodía se repartían más de 4.500 bolsas con salaíllas acompañadas con 150 kilos de bacalao desmigado, 1.000 kilos de habas frescas y 5.000 botellines de agua.
Un año más volvieron a instalarse en esta zona las barras de venta de bebidas, pinchitos, arroz, lomo con ajos, bocadillos… todas ellas con fines benéficos. No han faltado tampoco las actuaciones musicales con distintos grupos de baile de la ciudad y la banda municipal de música.
La peste que sufrió Andalucía en los últimos años del siglo XVI motivó que el Ayuntamiento de granada hiciera voto a San Cecilio en agradecimiento por librar a la ciudad de la enfermedad. Desde entonces, cada año, se ha organizado esta fiesta en torno al lugar donde cuenta la tradición que fueron martirizados los primeros cristianos llegados a Granada, entre los que estaba San Cecilio.
Junto a la fiesta popular que por todos los alrededores del Sacromonte se celebraba, en el interior de la abadía tenía lugar el acto institucional, con una eucaristía y la visita a las santas cuevas por parte de todas las autoridades civiles y militares asistentes. La eucaristía, presidida por Alberto Espinar, Abad del Sacromonte y Secretario Canciller del Arzobispado, contó con la participación de la mayor parte de miembros de la corporación municipal granadina, así como los máximos representantes en Granada del Madoc, Guardia Civil, Base Aérea de Armilla y representantes de la Junta de Andalucía.
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