El mandatario estuvo presente en la Jornada Mundial de la Juventud que se celebró en Rio de Janeiro
COMENTARIO: Mantendrá unas relaciones todo lo "ríspidas" que quiera con el clero boliviano, pero luego no respeta la libertad de conciencia de los ciudadanos bolivianos.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, anunció este miércoles que el 6 de septiembre se reunirá en el Vaticano con el papa Francisco.
"Quiero anticiparles, tal vez como una primicia, (…) que el Papa nos aceptó una cita para el 6 de septiembre", afirmó el presidente, citado por la agencia gubernamental de noticias ABI, en el poblado de Quillacollo, cercano a Cochabamba, 400 km al este de La Paz, escenario de la fiesta católica de la Virgen de Urkupiña.
"Vamos a prepararnos para ir con una buena delegación", precisó Morales.
El mandatario -según la agencia ABI- manifestó que le interesa conversar con el papa Francisco tras escuchar sus reflexiones durante la misa que cerró la Jornada Mundial de la Juventud que se celebró en Rio de Janeiro en julio.
"'Sin miedo hay que servir al pueblo', dijo el Papa. Eso quiero mejorar, servir mejorando, servir al pueblo", aseguró Morales.
El presidente, un indígena de tendencia izquierdista, mantiene ríspidas relaciones con el clero boliviano, al que acusa de apoyar a la derecha opositora.
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